La piel saludable empieza aquí

La cuestión de la piel clara: se trata mucho de tu digestión y hormonas y tal vez no tanto que ver con los productos. Eso no quiere decir que los productos no funcionen, sino que se trata más de lo que está sucediendo adentro que de lo que está haciendo afuera.

Los cambios en tu piel pueden ocurrir por muchas razones. Notamos grandes cambios cuando viajamos y comemos diferente, así como cuando estamos en nuestro ciclo menstural. Está bien documentado que la digestión saludable conduce a una piel más clara. Presta atención a tu digestión cuando su piel está enrrojecida, con manchas o tienes mucho acné y usa métodos naturales para ayudar a sanarla.

¿Qué causa la mala digestión?

• Consumir una dieta rica en alimentos procesados, carbohidratos refinados y azúcar.

• Comer demasiados productos lácteos

• Comer alimentos a los que tiene sensibilidades (gluten y huevos, por ejemplo)

• Consumir demasiado alcohol

• Vivir un estilo de vida estresante

• No hacer suficiente ejercicio

Adiós al azúcar, gluten y soya (al menos temporalmente) Muchas personas tienen alergias alimentarias, pero aún más tienen sensibilidades alimentarias. A menudo, las condiciones de la piel son causadas por estos alimentos sensibles; deja estos cuatro alimentos sensibles comunes durante tres semanas y observa cómo se transforma su piel. Estos alimentos pueden provocar inflamación intestinal y afectar la flora intestinal saludable y, por lo tanto, la digestión general y la piel. Consume probióticos Estas "bacterias buenas" viven en nuestro tracto digestivo y ayudan a mantener nuestros niveles de pH en un lugar que permite que nuestros cuerpos absorban nutrientes beneficiosos para la piel y también ayudan a eliminar los desechos. Puedes obtenerlas de alimentos fermentados como la kombucha.

Dieta basada en plantas Lo que pones en tu cuerpo es posiblemente más importante para tu piel que lo que pones en ella. Comer una dieta basada en alimentos integrales, rica en verduras y frutas, es la mejor manera de promover tu tracto digestivo y su piel en el camino hacia el bienestar. Complementar tu dieta con nueces, semillas, granos integrales (como quinoa, mijo y amaranto), así como legumbres es excelente. Si comes productos de origen animal, asegúrate de que éstos sean alimentados con pasto y consumir carne no más de una vez al día.

Haz ejercicio Al aumentar su ritmo cardíaco una vez al día, ayuda a que los nutrientes circulen por tu piel y eliminen las toxinas. Además, ciertos estiramientos y posturas de yoga pueden ayudar a promover la evacuación. El ejercicio también ayuda a reducir los niveles de estrés, lo que lleva a una piel más saludable y de aspecto más joven. ¡Cuidar tu piel, es cuidar de ti misma!