Una vida sin basura

Bea Johnson, autora de Zero Waste Home, responde a la pregunta qué es Zero Waste de la siguiente forma “Zero Waste o Cero Residuos es una filosofía basada en un conjunto de prácticas para evitar lo máximo posible la generación de basura.”

¿Por qué surge este movimiento? En unos pocos años estamos agotando los recursos del planeta, además de estar contaminando el mundo en el que vivimos con nuestra basura, acabando con vida animal y vegetal, repercutiendo a su vez en nuestra salud y bienestar presente y futuro. ¿Reciclar? No es suficiente Te damos unos tips básicos para que comiences tu transición a este estilo de vida:

1. Cambia tus servilletas o tissues por pañuelos

Quizás el papel sea biodegradable y relativamente fácil de reciclar, pero siempre es mucho mejor no desechar nada, lo cual genera menos energía. Además, los pañuelos pueden ser muy lindos. Lleva uno siempre a la mano para lágrimas sorpresas, limpiarte las manos, envolver cosas o algún resfriado fastidioso. Busca los que más se adapten a tus necesidades y a tu estilo.

2. Olvídate de las botellas plásticas

Siendo sinceros, esto es lo más fácil de hacer. Hay muchos envases de agua de aluminio o de vidrio que puedes cargar siempre contigo con agua o tu bebida favorita, y estas pueden ser muy económicas. Además, son muy duraderas y cuando ya no sirvan, son mucho más eco-amigables. ¡Vale la pena!

3. Dile adiós a los envases de plástico

Cuando dejas algunos alimentos en envases de plástico como pasta y otras comidas con salsas, puedes notar que luego de unas pocas horas el envase queda manchado con la salsa. Lo mismo sucede a la inversa: cuando guardas comida en envases de plástico, especialmente si la calientas ahí, la pared del plástico se filtra en tu comida. Prefiere envases de vidrio o de metal inoxidable. Son mucho más reciclables que el plástico y tendrás tu comida a salvo de la contaminación de plástico.

4. ¡Lleva tus propias bolsas ecológicas al mercado!

La lista puede seguir y seguir. Otras cosas que puedes sustituir son el papel aluminio, las toallas de papel, tu cepillo dental (no te asustes, hay alternativas hechas de bambú que son más ecológicas que el plástico usual), las esponjas para lavar, entre muchas otras. Solo debes tener un poco de creatividad. Ahora ve y salva al mundo.Para nadie es un secreto que en los vertederos y vías fluviales hay una cantidad ingente de bolsas plásticas. Se pueden reemplazar fácilmente siempre teniendo bolsas de tela en tu bolso o cartera, para ir al mercado o simplemente cada vez que necesites llevar algo. Además, es mucho menos probable que se rompan y se esparza todo el contenido que llevaba.

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